No importa si se trata de una fábrica de químicos, una compañía de software o una agencia de marketing, todas las empresas están expuestas a diversos peligros como ataques cibernéticos o robo de información, entre muchos otros.

Para evitar lo más posible estos incidentes, las empresas recurren a especialistas en riesgos laborales, quienes tras una evaluación minuciosa identifican los peligros que podrían afectar a los empleados o el funcionamiento de una compañía para posteriormente diseñar los protocolos de seguridad empresarial.

Protocolos de seguridad empresarial

Son documentos en los que se especifican los lineamientos y pasos a seguir de los diversos procesos de seguridad de la compañía con el fin de evitar accidentes o para saber cómo actuar en caso de alguna afectación por factores externos, como fenómenos meteorológicos o incendios. También pueden estar dirigidos hacia la prevención, estableciendo protocolos de salud, como por ejemplo, contra el COVID-19.

¿Cuántos tipos de protocolos de seguridad empresarial existen?

La cantidad varía dependiendo el tamaño de la empresa, pero generalmente se pueden dividir en cinco tipos:

Protocolos estándar. Establece las normas para situaciones cotidianas como la presentación con un cliente o cómo atenderlo.

Protocolos de eventos. Se aplica únicamente en caso de celebraciones externas o internas, y se centra en las normas de etiqueta y vestimenta.

Protocolos de actos públicos. Como su nombre lo dice, estos se realizan en eventos oficiales o gubernamentales de la empresa.

Protocolos internos. Son las normas de comportamiento, manejo de maquinaria, etc., que deben seguir los trabajadores dentro de la empresa.

¿Cómo deben ser los manuales de protocolos?

Al momento de redactar un manual de protocolo es necesario hacerlo manteniendo cuatro pilares básicos.

1. Practicidad. Debe recopilar las normas protocolarias necesarias para el óptimo funcionamiento de la empresa, pero sin caer en información excesiva o confusa.
2. Claridad: La redacción del texto debe ser clara y precisa para evitar malos entendidos o interpretaciones distintas.
3. Flexibilidad: Las normas protocolarias deben tener la cualidad de poder ser modificadas en caso de ser necesario, eso sí, conservando su esencia.
4. Accesible: Todos los miembros de la empresa deben poder tener acceso a los manuales de protocolo en el momento que necesite consultarlos.

¿Cómo diseñar un protocolo de seguridad para tu compañía?

Los protocolos de seguridad empresarial son de gran importancia para mantener la estabilidad económica de una compañía al reducir los accidentes. Por ello, es importante que se recurra al asesoramiento de expertos en riesgos laborales.

En BROVE contamos con un grupo experimentado de asesores que te darán la orientación que necesitas y te ayudarán a elaborar los protocolos que tu empresa necesita. Ponte en contacto con nosotros.